INFORME SOBRE EL CASO
ABDERRAZAK MOUNIB-AHMED TOMMOUHI
Tote Henares, abril 2006
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Caso Terrassa |
Fecha y hora: Entre las 2,00 y 3,00 h
del 3-11-1991
Lugar: Terrassa (Barcelona)
Delito: Robo con intimidación y
toma de
rehenes
Víctimas: Patricia S. y Mateo V. [
Nombres
ficticios ]
Juzgado de Instrucción: 8 de
Terrassa
Implicados:Tommouhi y Zaidani
Sentencia: Sección 6ª de
la Audiencia
Provincial de Barcelona de 21-1-1993.
Condenado: Ahmed Tommouhi
Reseña
Patricia S.
y
Mateo V. se encontraban, en el interior de su coche, aparcado junto a
un
almacén de butano. Dos individuos armados, uno con una
pistola y el
otro, con
una porra se dirigieron hacia el coche. El que llevaba la pistola
dió
un golpe
en el vidrio de la puerta y, diciendo que eran policías, les
pidió la
documentación. Al entregársela, Mateo V. fue
obligado a bajar del coche
y
puesto de cara contra el vehículo. Le ataron las manos y le
vendaron
los ojos.
Fue golpeado por el de la porra. Les quitaron el dinero y otros objetos
y Mateo consiguió huir. A Patricia S. le vendaron los ojos,
la subieron
a una
furgoneta, en la que, tapada con una manta, fue amenazada de muerte.
Después de
dar vueltas, durante una media hora, fue abandonada.
Descripciones
- Mateo V., en comparecencia, en la
Comisaría de Terrassa, a las 14,22 h del día
3-11-91: "Que debido a la oscuridad del lugar
como características de los autores
del hecho sólo puede aportar que: Ambos eran de unos 30 a 35
años de edad, 170
de estatura, complexión fuerte, y que el de la porra hablaba
en idioma
extranjero, al parecer árabe. Que el otro que
empuñaba la pistola hablaba en
español, pero, también con acento
árabe, vistiendo una cazadora al parecer de
color azul."
- Patricia S., en comparecencia en la
Comisaría de Terrassa, a las 15,49 h del día
3-11-91: "El que portaba la pistola, era de
complexión fuerte, de unos treinta y
cinco años, de raza árabe, de unos ciento setenta
centímetros de estatura.
Vestía las siguientes prendas, chaqueta de piel o cuero
negro, con chándal de
color azul oscuro, zapatillas deportivas color blanco, ignorando
más datos. El
que portaba la porra, de raza árabe, de unos treinta
años de edad, de
complexión delgada, de unos ciento setenta y tres
centímetros de estatura,
ignorando más datos del mismo."
Circunstancias en
las que vieron a
sus agresores
De
noche; deslumbrados, por una linterna, en los primeros momentos;
posteriormente, con los ojos vendados; amenazados y golpeados. Patricia
S.
estuvo tapada con una manta durante el recorrido en la furgoneta.
Respecto a
Tommouhi
manifestó que "no lo
había visto de
frente sino de perfil" y "el
acusado era el que estaba todo el rato girado".
Reconocimientos
1) Rueda de 12
de noviembre. Juzgado de Instrucción nº 2
de Terrassa.
Inculpados:
Tommouhi y Zaidani
- Patricia S.: "Que cree
que uno de los imputados es el 5º por la izquierda y el 3º
le parece que puede ser el que golpeó a su novio."
(Cambiado
el orden y puestos de perfil): "Que
reconoce al 3º por la izquierda (Tommouhi) con toda seguridad y además fue el que
le apuntó con una pistola y el
7º (Zaidani) cree
según le ve que
pueda ser el acompañante (palabra ilegible) que no puede asegurarlo que en esta postura de
perfil le sirve
para afirmar con
más seguridad porque
así es como les vió."
2) Rueda de
14 de noviembre. Juzgado de
Instrucción nº 14 de Barcelona.
Inculpados:
Tommouhi y Mounib
- Patricia S.: "Reconoce
sin lugar a dudas al 1º como a uno de los inculpados sin
reconocer a ninguno más".
3) Rueda de
23 de diciembre. Juzgado de
Instrucción nº 8 de
Terrassa
Inculpado:
Ahmed Tommouhi
- Patricia S.: "Que
reconoce sin ningún género de dudas al
2º individuo, según se mira
de izda.a dcha. como el autor del robo con intimidación del
que
fue víctima y no
reconoce a
ningún otro".
- Mateo V.: "Que no
reconoce a ninguno de los integrantes de la rueda".
Se
puede comprobar, una vez más, que el grado de seguridad, en
la identificación
que hace la víctima., aumenta cada vez que ve, de nuevo, a
Tommouhi.
Otros datos a
tener en cuenta
• Zaidani que fue llamado como
testigo, declaró en el juicio que él "dormía
en esa pensión antes que el acusado…llevaba un
mes antes de ser
detenido por la policía en aquella pensión con un
amigo con quien vino de
Almería. Que al acusado lo vió en la
pensión dos o tres días solo,
…Durmió con
ellos tres días."
En
la Sentencia, al rechazar que esto pruebe que Ahmed Tomouhi no estaba
en
Terrassa el día del robo, se dice: "Asimismo
negó que el día de los hechos hubiera estado en
la ciudad de Terrassa cuando en
el folio 31 de las actuaciones consta la declaración del que
ha depuesto como
testigo en el juicio oral Mustafa Zaidani, quien manifestó
que la madrugada del
tres de noviembre de 1991 se hallaba durmiendo en la pensión
del pasaje aquí en
Terrassa. Que estaba en la habitación además del
dicente Ahmed Tomouch de quien
no sabía entonces ni el nombre si bien más
adelante se desdice y limita la
presencia a tres días antes de la detención."
En
la declaración, de 20-12-91, a la que se refiere la
Sentencia, lo que había
dicho Zaidani fue lo siguiente: "Que no
conoce a Ahmed
Tommouch, que la madrugada del tres de noviembre de 1991 se hallaba
durmiendo
en la pensión del Pasaje aquí en Terrassa. Que
estaba en la habitación además
del dicente Ahmed Tommouch de quien no sabía entonces ni el
nombre y un tercero
amigo del dicente que vino con el desde Almería y que se
llama Benallal Jamal
…y que Ahmed fue a la pensión el día
digo que ignora el día concreto si bien
recuerda que llegó a la pensión tres
días antes de aquel en que lo detuvieron…"
La interpretación
que hace el Juez sobre lo que parece, más bien,
un malentendido sobre la fecha le lleva al convencimiento de que
Tommouhi
estaba en Terrassa el día de los hechos.
• Durante el juicio,
también declararon cuatro marroquíes que, hasta
tres
días antes de su detención, Tommouhi
vivía con ellos en una especie de
garaje, en Martorell, y que dormía con ellos
todas las noches, no sabía conducir y hablaba muy poco el
español. Estos
testimonios no sirvieron como prueba ya que, según la
sentencia: "Han reconocido que todos ellos tenían la
llave de la vivienda con la
que podían entrar y salir libremente…".
• Respecto a la alegación
de Tommouhi de no saber
español, también, se le niega validez ya que "vertió
en autos una declaración en castellano sin
utilización de intérprete verificada
el día 14 de noviembe de 1991 a presencia judicial y con
asistencia letrada,…en
la que el acusado refiere datos acerca de su edad, su familia, la edad
de sus
hijos, …". (No parece que responder a preguntas
tan simples acredite
un mínimo conocimiento de una lengua)
Las
declaraciones que situaban a Tommouhi en Martorell y el hecho
de desconocer el español -idioma utilizado por el agresor
identificado como
Tommouhi- no se aceptaron como pruebas y en la Sentencia se considera que
"El
acusado ha aportado dos datos que se han revelado inciertos…
Debiendo resaltar la doctrina del Tribunal Supremo relativa al valor de prueba
'complementaria' que
pueden tener los contraindicios aportados por el acusado que luego se
revelen
falsos."
• La víctima, Mateo V.,
declaró, y así lo recoge la Sentencia que "a pesar
de que era de noche se veía porque había luna
llena". En
realidad, faltaban 3 días
para la luna nueva y ni siquiera era visible a la hora de los hechos.
• Durante el juicio, Patricia S.
declara "Que en la primera rueda dijo 'Creía que
era él', en la segunda al verlo
de frerente (sic) ya lo
reconoció bien, que antes
le había visto en la Sala donde tomaban
declaración y le oyó hablar…".
Esto confirma
que la rueda estuvo viciada.
Fundamento de la
sentencia
(En
referencia a la identificación de Patricia S.) : "De cuya testifical y fundamentalmente de la
identificación
verificada sin duda al acusado por la
testigo que le reconoció primero oyéndole hablar
y posteriormente por el perfil
en el que destacaba la coronilla calva y el vientre, resulta
a juicio de la
Sala la acreditación plena
del
acusado como el autor de los hechos …"
Conclusión: Ahmed Tommouhi fue condenado por la
identificación de una víctima que, en una primera
rueda, también, había reconocido a Zaidani, y que
había visto a su agresor de perfil y deslumbrada por una
linterna, en una noche, prácticamente, sin luna. Tuvo
más peso esta identificación, que
llegó a ser "sin ningún
género de dudas"
la tercera vez que Tommouhi
le fue presentado en rueda, que la identificación negativa
que hizo la otra víctima, las declaraciones de cinco
testigos marroquíes y la ausencia de cualquier prueba
material. Las dos primeras ruedas fueron irregulares y la tercera
estaba viciada por las anteriores. El
juicio fue posterior a la sentencia conenatoria del caso de
Cornellá. |